Tras varios días de búsqueda, encontraron muerto a Luan

El 13 de agosto, la desaparición de Luan Gómez, un niño de un año y medio, en la población de Mayaya, La Paz, conmocionó a Bolivia. Su desaparición, ocurrida frente a la puerta de su casa, movilizó a equipos especializados y unidades especiales de la Policía, generando una ola de preocupación y especulaciones sobre su paradero.

El caso de Luan sensibilizó a la comunidad, en un contexto donde también continúa la búsqueda de Loan Danilo Peña, otro menor desaparecido en Corrientes. La incertidumbre y el temor se apoderaron de la población, mientras se barajaban diversas hipótesis, incluyendo la posibilidad de un secuestro.

Cuatro días después de su desaparición, el sábado 17 de agosto, el cuerpo sin vida de Luan fue encontrado a orillas del río Kaká, en la comunidad de Pahuimo, a 50 minutos de Mayaya. El cráneo del pequeño presentaba una pérdida del 80%, lo que dificultó su identificación inicial. No obstante, sus padres lo reconocieron por la ropa que llevaba el día que desapareció y por sus características físicas.

La autopsia realizada por el Instituto de Investigación Forense (IDIF) reveló que Luan falleció a causa de un traumatismo encéfalo craneal, producto de un fuerte golpe en la cabeza. Esta lesión fue tan grave que provocó la pérdida de gran parte de su cráneo y, finalmente, su muerte. A pesar de que no se encontraron otras lesiones en el cuerpo del niño, el informe forense sugiere que el golpe podría haber sido causado por una caída, aunque no se descarta la posibilidad de que haya sido intencional.

El caso de Luan ha generado un profundo impacto en Bolivia, aumentando la preocupación por la seguridad de los menores en el país. La Fiscalía Departamental de La Paz ha anunciado una conferencia de prensa para el próximo lunes, donde se ofrecerán más detalles sobre la investigación en curso, en busca de esclarecer este trágico suceso que ha dejado a toda una nación en vilo.