Dos intendentes acomodaron a sus hijos en la Legislatura
Nilson Ortega y Julio Bravo, los cuestionados jefes comunales allanaron el camino para sus herederos políticos.
En Jujuy hoy se renovaron 24 bancas en la Legislatura Provincial de las cuales 18 pertenecerán al Radicalismo y otras 6 al Frente de Todos. Nuevas caras, figuritas repetidas y eternos diputados atornillados a las bancas.
La elección anticipada de Junio sirvió para que dos históricos intendentes de localidades de Jujuy acomoden a sus hijos para integrar y gozar los beneficios de la casta política, mientras cientos de jóvenes jujeños sin trabajo
Tal es el caso de Nilson Ortega, intendente de Monterrico y dirigente justicialista acomodó a su hijo y diputado electo Juan Ortega para ocupar una banca en la casa de piedra.
El radicalismo también hizo lo suyo y así fue que Julio Bravo, intendente de San Pedro y conocido por insultar policías, colocó a su hija en uno de los primeros lugares de la lista de Cambia Jujuy para que hoy pueda asumir como diputada.
Además de hijos diputados, los jefes comunales tienen en común un tendal de cuestionamientos sobre sus respectivas gestiones. Cuales patrones de estancia, han comandado los Ejecutivos Municipales a gusto y en detrimento de los ciudadanos que no pierden oportunidad para resaltar el cuadro de indignación vigente.
A estas alturas, es imposible obviar la impunidad de la que se sirven los intendentes, Ortega y Bravo son un claro ejemplo. Mientras los Concejos Deliberantes apenas funcionan como una escribanía, el proceder es a lo patrón de estancia. Quizas, el caso más emblemático es aquel papelón protagonizado por el líder del Ejecutivo Municipal de San Pedro, quien insultó y amenazó a efectivos policiales sin recibir ningún tipo de sanción hasta el momento.
Cuestionado bravo? Gana por cagada cada vez que se presenta.... Quien escribe esto ?
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y cuando fue distinto, una sarta de mamarrachos estos políticos y nadie va a decir nada porque van por el mismo camino
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