Denunciaron otra vez por abuso sexual al diputado Nasif: el terrible relato

Una nueva denuncia penal contra el diputado provincial Marcelo Nasif por abuso sexual fue presentada en la fiscalía especializada en violencia de género. En esta oportunidad, se trata de una joven que trabajaba como administrativa en la Secretaría de Protección de la Comunidad, cuyo titular era Nasif. El hecho ocurrió en el año 2010. Con el patrocinio de las abogadas Natacha Freijó y Claudia González, la denuncia es por el delito de abuso sexual.

Quien denuncia es Claudia Navarro, hoy empleada administrativa del Ministerio de Educación. En diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5), contó el ataque que padeció de parte de Nasif, tal como está plasmado en el escrito que presentó en la fiscalía. Y aseguró que su objetivo es «que se sepa la verdad, que se conozca la perversidad que ese hombre tiene y que todos sepan qué clase de diputado tenemos».

«No puedo creer que él ande impune y que lo sigan tapando, que siga en la Legislatura. ¿Qué clase de legisladores tenemos?», interpeló la joven.

Es que esta no es la primera denuncia contra Nasif por violencia laboral o acoso sexual. Y en este sentido, Claudia Navarro planteó otro objetivo: «Que todas las chicas que hayan sufrido lo mismo se animen a hablar, aunque sea tarde».

Sobre el tiempo que demoró hasta decidirse a presentar la denuncia en la justicia, dijo que le costó mucho poder hablar de lo que padeció.

Finalmente, se animó cuando leyó la solicitada que el diputado publicó a raíz de otra denuncia en su contra por abuso sexual, una causa en la que salió sobreseído aunque hay pendiente un planteo en la justicia. «Me dio bronca ver la impunidad con que él hizo su solicitada, que denuncie a una chica que pasó por lo mismo que yo, porque yo le creo, yo lo he pasado, a mí me lo hizo», afirmó la joven.

Si bien buscó ayuda y asesoramiento apenas ocurrido el violento episodio, Claudia desistió de hacer la denuncia porque todos le decían que necesitaba pruebas. «Yo era una simple trabajadora, y él una figura pública -señaló-. Así que pensé ?que Dios se encargue de él', porque no podía hacer nada y tenía que seguir trabajando para mantener a mis hijos».

El día del ataque, Nasif había citado a Claudia en su oficina, adonde la joven fue con una sobrina pequeña. «Pasá vos sola», cuenta Claudia que le dijo. Cuando ella entró, el entonces funcionario la arrinconó y la forzó. «Gritá todo lo que quieras, que acá nadie te va a ayudar», dice que le dijo. Sólo se detuvo cuando ella le reveló que estaba embarazada.

Al mes siguiente, Claudia descubrió que le habían dado de baja en la capacitación con la que contaba para completar sus ingresos. «Empiezo a preguntar y me dicen del Ministerio de Educación que él me había dado baja porque no iba a trabajar. Pero era mentira. Yo tenía todas las planillas firmadas. Pero él me había dado de baja por no acceder a sus peticiones sexuales».

Así se lo explicó a las autoridades del ministerio, y logró que volvieran a otorgarle la capacitación y la destinaran a cumplir tareas en el mismo colegio donde trabaja actualmente.

Claudia hoy tiene un hijo de 22 años y uno de 11. Dice que nunca contó lo que pasó, ni siquiera a su familia. «Porque me daba vergüenza», asegura. Pero ahora quiere que se sepa la verdad, quiere «animar a todas las mujeres que han sufrido violencia laboral y acoso sexual por parte de Nasif, se animen a hablar. Porque esto no puede quedar impune».

Por el tiempo que pasó, es posible que la denuncia penal no prospere. En ese caso, las abogadas piden en el escrito que «se prosiga igualmente con la investigación, puesto que el derecho de la víctima a conocer la verdad igualmente subsiste, a pesar de que no se pueda aplicar pena alguna al agresor».

Pedido a la Legislatura

Además de la denuncia en la justicia, las abogadas Freijó y González presentaron una nota al presidente de la Legislatura provincial, el vicegobernador Carlos Haquim, donde piden que ese cuerpo «juzgue la conducta del legislador y/o habilite una investigación (...) que pueda dar cuenta de la (in)habilidad moral sobreviniente a su incorporación», argumentando que desde que ocupa su banca, pesan sobre Nasif varias denuncias.

«Como abogadas de víctimas de violencia estamos convencidas que esta Legislatura no puede pasar por alto el nuevo hecho aquí denunciado», afirman, y más adelante advierten: «Que un diputado acusado de violento siga sesionando es transmitir a las víctimas un claro mensaje de impunidad, esto es, que vuestro parlamento tolera la violencia y abuso contra mujeres en una provincia donde este mismo cuerpo ha declarado la emergencia en violencia de género».

Fuente: El Submarino de Jujuy