El llamado al 911 que desesperó a todos: encontraron sin vida a una radióloga

Dolor absoluto

César Florentín, de 20 años, está bajo la lupa de la Justicia como principal sospechoso del crimen de Noelia Torres, una radióloga de 34 años asesinada a puñaladas en su domicilio de Burzaco, Buenos Aires. El caso, ocurrido el 8 de marzo, aún está en plena etapa de investigación. Se aguardan los peritajes de los teléfonos celulares de ambos y el resultado definitivo de la autopsia, que podría demorar hasta un mes. Según relataron amigas de la víctima a TN, los primeros análisis confirmaron que Noelia recibió 15 puñaladas.

El fiscal José Luis Juárez, a cargo de la UFI Nº12 especializada en Violencia de Género, solicitó recientemente la prisión preventiva para Florentín, quien hasta el momento no declaró. La Justicia de Garantías de Lomas de Zamora deberá resolver si hace lugar a ese pedido. Mientras tanto, el joven permanece detenido y está imputado por el delito de "homicidio agravado".

El crimen se conoció cuando Noelia, que había sido invitada a un baby shower, no asistió al evento ni respondió mensajes. Esa misma tarde, sus allegados, preocupados por la falta de contacto, alertaron al 911. Al llegar a su departamento ubicado sobre la calle Adolfo Alsina al 1000, la policía encontró las llaves puestas desde adentro. Tras forzar la entrada, hallaron su cuerpo con múltiples heridas de arma blanca en la cara, manos y pierna izquierda.

Los primeros testimonios recabados por los investigadores señalaron que existía un vínculo tenso entre la víctima y Florentín. Por esto, los efectivos se dirigieron a su domicilio. Allí lo encontraron con manchas de sangre y heridas visibles. "Se lo encontró nervioso, tenía lesiones en su cuello", revelaron fuentes policiales.

Sin embargo, desde el entorno de Noelia surgieron versiones que ponen en duda la existencia de una relación cercana entre ambos. "No había tal relación", afirmó una amiga a TN. También aclaró que un conflicto ocurrido en noviembre de 2024 no fue con él, sino con una mujer que convivía en el mismo departamento. "Con ella fue el entredicho, de que dejaba los animales en el balcón y no aparecía por una semana. Le dijo que si iba a rescatar animales que los cuide, porque los dejaba en el balcón y se pasaban para su lado. Ese fue el único entredicho", aseguró.

"Eso fue en noviembre, este año no había pasado nada. Ni siquiera sé si se saludaban como vecinos, porque no compartían la misma entrada", agregó. Ante las dudas sobre si Noelia había manifestado temor o signos de acoso, concluyó: "Nunca me dijo que le tenía miedo ni que la había hostigado, para nada".

El pasado 8 de abril, al cumplirse un mes del crimen, familiares, amigas y vecinos de Noelia organizaron una movilización en Burzaco para pedir justicia. "Fue muy emotivo", describieron quienes participaron del acto, que tuvo lugar en la intersección de avenida Espora y Esteban Adrogué.