Denuncian un brutal ataque homofóbico en un pub de Jujuy : "Nos sacaron porque nos besamos"

José Jaime compartió la terrible experiencia de violencia homofóbica que habría vivido en la madrugada del 5 de junio. Su relato describe cómo él y su pareja, junto a un amigo, visitaron el pub Seven, ubicado en Avenida El Éxodo, alrededor de las 12:30 de la noche para disfrutar de una bebida. Sin embargo, a las 3:30 de la mañana, como cuenta él, su noche de diversión se habría transformado en una pesadilla.

El joven denunció que uno de los guardias de seguridad del bar se habría acercado y les habría dicho que no podían estar besándose y dándose abrazos ni desmotraciones de cariño, como lo podría hacer cualquier pareja. Segun el relato, aunque Jaime intentó dialogar, el patovica lo habría inmovilizado y lo habría sacado del local por la fuerza. 

"Me dijo que no podía hacer eso acá. Le respondí que no estaba haciendo nada malo, pero igualmente me sacó del lugar, inmovilizándome. Nos sacaron porque nos estábamos besando y no causamos ningún disturbio dentro del bar", comentó Jaime. 

Afuera, siguió cuestionando la injusticia de la expulsión, pero pronto se dio cuenta de que cuatro patovicas pesuntamente lo seguían. Luego, siguió narrando que los guardias del pub lo habrían golpeado y llevado a la ex estación de servicio Refinor, donde lo derribarían y le propinarían una brutal paliza. 

"Nos comenzaron a golpear, y como soy alto, no me podían voltear. A golpes me llevaron hasta el Refinor, donde finalmente lograron hacerme caer. Allí comenzaron a darme patadas en la cabeza hasta que perdí la conciencia", dijo Jaime. 

A su vez, contó que su pareja también habría sido agredida al intentar protegerlo, y según Jaime, "mi pareja se tiró encima de mí para defenderme, pero ellos le dijeron que no se meta y también lo golpearon".

"Un policía adicional logró parar la gresca y los agresores salieron corriendo. Gracias a él y a un milagro, sigo vivo", dijo Jaime. Luego de recuperar el conocimiento, Jaime se subió a un remis y se dirigió a su casa. Más tarde, visitó a su médico particular, quien le ordenó una serie de estudios debido a la gravedad de sus lesiones.

Jaime presentó una denuncia detallada, aportando los datos de los agresores y recibiendo el apoyo de la comunidad LGBTQ+ local. Ahora espera que la justicia actúe contra los responsables de esta presunta agresión homofóbica, buscando no solo su propia reparación, sino también prevenir futuros actos de odio en la comunidad. "Estoy esperando que se haga todo lo posible desde la justicia. No quiero que esto le pase a nadie más", sentenció Jaime.