Revelaron las deudas que tenía la mujer policía que le quitó la vida a sus hijitos

Marina Silva, subinspectora de la Policía de San Luis, fue arrestada tras el trágico asesinato de sus dos hijos, Bautista Funes y Sofía de La Rocha, de dos y siete años. La investigación ha revelado que Silva atravesaba una profunda crisis financiera, con deudas que alcanzaban los $6,7 millones con distintas entidades bancarias y financieras.

De acuerdo con datos de la Central de Deudores del Banco Central de la República Argentina, a los que accedió El Chorrillero, la oficial mantenía una deuda de $3.269.000 con el Banco Nación y otra de $2.269.000 con Montemar. Además, Silva tenía otros compromisos financieros menores, como $941.000 con Credlap, $94.000 con Mercado Pago, $48.000 con Argencred y $33.000 con Bersatex, cifras correspondientes a los meses de julio y agosto de 2024.

El padre de Silva, al enterarse de la tragedia, reveló a los medios que su hija había acumulado deudas significativas y que tanto él como sus hermanos le habían prestado dinero y tarjetas de crédito para ayudarla. También señaló que el padre de uno de los niños había sufrido un accidente laboral recientemente, lo que retrasó el pago de la cuota alimentaria, agravando aún más la situación financiera de la policía.

Durante la audiencia del miércoles, se leyó una nota que Silva dejó escrita en el cuaderno de una de las víctimas, en la que expresa su desesperación: "Yo sola me llené de deudas y no supe manejarlo. Quise que no le falte nada a los niños". La carta también contenía un pedido de perdón a sus seres queridos: "Perdón, ya no pude más. No es culpa de nadie. Pero necesito paz. Pa y ma los amo, hermanos, gracias por todo y Jonathan perdón también, te amo".

Finalmente, en un acto desgarrador, Silva justificó sus acciones al señalar que no quería que sus hijos se convirtieran en una carga para nadie, añadiendo: "Los amo tanto, Bauti y Sofía, necesito que estemos juntos".