Denuncian a la municipalidad de Tilcara por usurpación de tierras
El municipio habría autorizado construcciones en territorio indígena sin consulta previa, generando un conflicto que afecta proyectos turísticos y agrícolas de la comunidad.
La Comunidad Indígena Pucará, ubicada en Tilcara, Jujuy, denunció la usurpación de sus tierras ancestrales por parte del municipio local, que habría autorizado construcciones en su territorio sin consulta previa ni consentimiento. Este hecho ha generado un profundo malestar entre los miembros de la comunidad, quienes exigen el cese inmediato de las obras y el respeto a sus derechos ancestrales.
Según relató Desiderio Olmos, vicepresidente de la comunidad, el conflicto comenzó cuando, en la mañana del jueves 13 de febrero, se detectó el avance de maquinarias y trabajadores en el territorio indígena. Al indagar, descubrieron que el municipio habría autorizado a una comparsa local, presidida por un tal Soto, a realizar construcciones en el lugar.
"Nosotros teníamos planeado construir un salón comunitario y una casilla turística para recibir visitantes y promover el turismo comunitario, pero ahora nos encontramos con que el municipio avaló a terceros en nuestro territorio", explicó Olmos.
La comunidad cuenta con una carpeta técnica y resoluciones que avalan su posesión sobre el territorio, donde han vivido y trabajado por generaciones. Además, desarrollan actividades agrícolas, como el cultivo de nueces, duraznos, manzanas, choclos, papas y tomates, y promueven el turismo rural con actividades como cabalgatas, trekking y maratones, que generan empleo para los jóvenes de la comunidad.
"La intendente Sonia Pérez sabe que tenemos carpeta técnica, resoluciones y organizada a toda nuestra comunidad".
Olmos expresó su indignación ante la falta de respeto por parte del municipio: "Nos exigen presentar proyectos con arquitectos e ingenieros, y cuando lo hacemos, nos suspenden las obras. Sin embargo, a otros les permiten construir sin cumplir con los mismos requisitos. Esto es una clara discriminación y una vulneración de nuestros derechos".
El conflicto se agrava por el antecedente del parador turístico, donde la comunidad ya había enfrentado obstáculos similares. En esa ocasión, el municipio les exigió cumplir con normativas que, según Olmos, no se aplican con el mismo rigor a otros proyectos en la zona.
La comunidad ha solicitado la intervención del fiscal para suspender las obras y garantizar el respeto a su territorio. "Tenemos pruebas de que estas tierras han sido de nuestros abuelos y ancestros. No permitiremos que nos las arrebaten", afirmó Olmos./ Jujuy al Momento
Comentarios