El Gobierno Nacional gastó más de $75 millones en medialunas y café: ¿y la motosierra?

En una reciente licitación pública, el Gobierno Nacional adjudicó una compra de $61.306.200 (aproximadamente 48 mil dólares), en provisiones para desayunos y meriendas en la Casa Rosada. La compra, que incluyó café, azúcar y edulcorante, fue ganada por una sola empresa: Cabrales S.A.

Según el expediente publicado el 5 de agosto (EX-2024-57926642), la adquisición incluye:

• Café en grano: 3 mil kilos a un costo de $17.350 por kilo.
• Azúcar: 800 cajas, cada una con 800 sobres, a un precio de $14.500 por caja.
• Edulcorante: 600 bultos a un precio unitario de 3.827 pesos.

La licitación fue gestionada por la Unidad Operativa de Contrataciones bajo la Dirección de Administración de la Secretaría General de Presidencia, actualmente dirigida por Karina Milei, hermana del presidente Javier Milei. Este proceso suscitó inquietudes debido a que Cabrales S.A. fue la única empresa que se presentó a la licitación pública.

El expediente también incluye la firma de Pablo Sebastián Benvenuto, quien previamente autorizó la polémica compra de medialunas para la Casa de Gobierno, que también fue objeto de críticas en redes sociales.

Además de la reciente compra de café, azúcar y edulcorante, el Gobierno destinó $16 millones en medialunas y panes para los desayunos en la Casa Rosada y Olivos. Estos productos fueron adquiridos al mismo proveedor que tenía el Gobierno de Alberto Fernández.

La situación generó un debate sobre la transparencia y la competitividad en los procesos de licitación pública. La compra de alimentos para la Casa Rosada, especialmente con un solo proveedor y en cifras tan significativas, lleva a cuestionamientos sobre la gestión de los recursos públicos y el posible favoritismo en la adjudicación de contratos.

La adjudicación de contratos de gran envergadura a un único proveedor y las cifras involucradas en las compras para la Casa Rosada plantean interrogantes sobre la transparencia y el manejo de los recursos públicos en la administración actual. Este "mamarracho" se da a conocer en el marco en el que el gobierno nacional quiere recortar y vetar los aumentos a los jubilados. No hay plata para algunas cosas y para otras irrelevantes, sí.