Monterrico: Moreira echó a 180 trabajadores pero creó un gabinete "monumental"
Angustia y preocupación a días de las fiestas.
La ciudad de Monterrico se ve sumida en una situación angustiante, ya que el nuevo intendente, Luciano Moreira, tomó la polémica decisión de despedir a 180 empleados municipales justo antes de las fiestas de fin de año.
Concejales justicialistas cuestionan en este contexto la creación de un extenso gabinete con numerosos funcionarios, incluyendo la designación de un director de religión y culto, cuya función aún no está clara.
El intendente Moreira justifica los despidos argumentando que es una práctica común en cada cambio de gestión y que el municipio carece de los fondos necesarios debido a recortes en la coparticipación por parte del gobierno provincial.
Sin embargo, estas declaraciones se ven contradichas por la misma acción del jefe comunal, quien ha establecido un gabinete considerable con 9 secretarías, diversas direcciones y jefaturas, entre otras designaciones, cuyos salarios superarán ampliamente a los de los trabajadores despedidos. Estos últimos, al ser cesanteados, no habrían reicibo consideración por antigüedad ni por su estado contractual.
El Bloque de Concejales del Partido Justicialista, opositor a Moreira, ha cuestionado las razones del intendente, señalando que gestiones anteriores, desde 1999, lograron mantener hasta un 80% del plantel de empleados de la gestión anterior. Además, han solicitado al intendente que haga pública la documentación respaldatoria sobre la quita o afectación de fondos coparticipables que motivó el decreto municipal N° 038-M/2023, el cual formaliza los despidos en el municipio.
En este contexto, los trabajadores despedidos, quienes alegan que fueron cesanteados de manera injusta y sin consideraciones, manifestaron su descontento y solicitan la reincorporación. A la espera de la dictación de la conciliación obligatoria por parte de la Secretaría de Trabajo, llevaron a cabo una manifestación para visibilizar sus reclamos y anunciaron que continuarán con medidas de fuerza hasta obtener respuestas favorables.
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