El escándalo no para

Sigue la tensión en Uquía: trabajadoras municipales amenazan con encadenarse tras despidos

El Sindicato de Empleados y Obreros Municipales (SEOM) se movilizó en la localidad de Uquía para apoyar a dos trabajadoras que fueron despedidas. Siguen las acusaciones de nepotismo contra la comisionada municipal, Gabriela Flores.

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 El conflicto se intensificó después de que las empleadas, Karina Zambrano y Vilma Cunchila, fueran cesanteadas aparentemente por hablar con un vocal opositor, lo que fue visto como una represalia política.

Las trabajadoras inicialmente fueron notificadas de su despido, pero luego recibieron una comunicación que mencionaba una suspensión de 15 días. Tras cumplir ese período, al intentar reincorporarse a sus puestos, fueron informadas de su despido definitivo, bajo el argumento de "falta de recursos". Sin embargo, las acusaciones contra la comisionada señalan que, al mismo tiempo, ella promovió a su hermana y otros allegados a puestos de planta permanente, lo que fue interpretado como un caso claro de nepotismo.

Ante la falta de soluciones y la profundización del conflicto, las trabajadoras, con el apoyo del SEOM, han amenazado con intensificar las medidas de fuerza, incluyendo la posibilidad de encadenarse en protesta. Noemí Álvarez, secretaria del interior de SEOM, criticó duramente la situación, subrayando la injusticia de dejar sin sustento a dos personas que tienen menores a cargo, mientras se favorece a familiares de la funcionaria.

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