Hacía fiestas clandestinas y llevaba niñas: "Se escuchaban gritos y llantos"
La aberrante escena ocurría en la localidad de Rosario de la Frontera.
Ante la denuncia de los vecinos, el juez de Violencia Familiar y de Género de Metán, Carmelo Paz, ha ordenado que un hombre se abstenga de realizar reuniones sociales en las que participen menores de edad y de ejercer cualquier tipo de violencia física, psíquica o digital contra ellos.
Debido a la gravedad de las denuncias, el juez dispuso que se realicen rondas policiales periódicas diarias en la zona durante diez días. Si en ese periodo se produjeran hechos similares a los denunciados, se deberá brindar inmediata protección a las víctimas.
Además, se ha dado intervención a la Secretaría de Niñez y Familia delegación Rosario de la Frontera para llevar a cabo un abordaje interdisciplinario pertinente. También se ha involucrado a la Asesora de Menores y de Personas con Capacidad Restringida y a la Fiscalía Penal del Distrito Judicial Sur Rosario de la Frontera.
Las medidas impuestas por el juez tendrán una duración de seis meses, tiempo durante el cual se deberán tomar acciones de fondo en el fuero correspondiente para abordar y resolver el conflicto.
En caso de que el hombre incumpla las medidas dispuestas, la causa será remitida al fuero penal para la instrucción de un proceso por desobediencia judicial.
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