El piano embrujado que suena en medio de un monte norteño

A unos 25 kilómetros de la ciudad capital de Santiago del Estero, en la localidad de La Abrita, se erige el enigmático "Castillo del Francés" o "El Palacio de María", una construcción que atrae tanto a curiosos como a investigadores debido a su historia cargada de misterio y tragedia. Ubicado dentro de los terrenos de la Estación Experimental del INTA, este peculiar castillo ha sido escenario de numerosos relatos que combinan amor, traición y apariciones inquietantes.

La historia más conocida, que se ha transmitido a lo largo de los años entre los habitantes de la región, remonta sus orígenes a 1902. Un hombre de apellido Guidens, originario de Francia, llega a la zona como colono. Allí conoce a María, una joven de gran belleza, y ambos se enamoran. En un gesto de devoción, Guidens construye un majestuoso castillo para ella, sin saber que su historia de amor terminaría en tragedia.

Según la leyenda, María traiciona la confianza de Guidens, lo que provoca la furia del hombre, quien, devastado por el desengaño, decide asesinarla. Se cuenta que la enterró en una de las habitaciones del castillo, un lugar que en su época fue escenario de grandes fiestas y reuniones sociales. Incluso, como símbolo de su afecto, Guidens había comprado un piano para María, quien era hábil con este instrumento y también con el violín.

Lo más escalofriante de la historia es que, hasta el día de hoy, varios lugareños aseguran escuchar en las noches las notas de un piano que parecen provenir del interior del castillo. Algunos también afirman que, en ocasiones, los sonidos de violines se suman a la sinfonía fantasmagórica, como si el espíritu de María todavía estuviera presente, tocando en la oscuridad.

El castillo, construido en 1900 con materiales traídos de Europa, llegó a tener 18 habitaciones y un mirador que ofrecía vistas panorámicas que abarcaban hasta 40 kilómetros de distancia. Hoy, gran parte de la estructura se encuentra en ruinas, con una escalera que ya no existe, aunque aún se pueden ver vestigios de su antigua grandiosidad, como las bases de la escalera empotradas en las paredes.

José María Mladenoff, licenciado en educación y gestor cultural, ha dedicado años a investigar la historia de este castillo. A menudo organiza recorridos y actividades para estudiantes de fotografía y video, quienes viajan hasta La Abrita para conocer más sobre la fascinante historia del lugar. "No puedo confirmar si realmente se escuchan los sonidos, pero los testimonios de los lugareños son muy firmes. Para ellos, el piano y los violines son ecos de un pasado que se niega a desaparecer", comenta Mladenoff.

En su trabajo, Mladenoff busca ofrecer una visión más objetiva y documentada de los eventos que ocurrieron a principios del siglo XX en esta zona de Santiago del Estero. "Lo que me motiva es poder entender y transmitir lo que realmente ocurrió en ese entonces. Esta investigación no solo conecta la teoría con la práctica, sino que también pone en valor el patrimonio cultural de la provincia", añade.

Mientras tanto, el Castillo de María sigue siendo un misterio envolvente, tanto por su historia como por las leyendas que persisten en la memoria colectiva. Este lugar, marcado por el amor, la tragedia y lo inexplicable, continúa siendo un atractivo para aquellos que buscan descubrir sus secretos.