La muerte golpea a uno de los "Mambrú" y no puede curar esa herida

Emanuel Ntaka, conocido por su paso en la exitosa banda Mambrú, comparte un aspecto íntimo de su vida: la ausencia de su padre durante su éxito en la música. Aunque sigue adelante en su carrera musical, participando en el musical "Avenida Q" en el Teatro Maipo y explorando otros proyectos artísticos, aún le duele no haber podido compartir su éxito con su padre, quien falleció un año antes del apogeo de Mambrú.

En una entrevista reciente, Emanuel reflexiona sobre su presente, destacando su familia como un pilar fundamental en su vida. Junto a su esposa Guadalupe y sus hijos Milo y Ema, encuentra plenitud en las experiencias vividas, valorando no solo lo material, sino también lo espiritual. Expresa su preocupación por la creciente individualidad en la sociedad y aboga por una mayor conexión humana y compasión global.

Al ser cuestionado sobre su estado reflexivo, Emanuel reconoce estar en un momento de serenidad espiritual y mental, enfocado en tomar decisiones conscientes y buscar la felicidad. Destaca su interés en la conexión con el mundo y la naturaleza, reconociendo que todos formamos parte de un mismo ente.

En cuanto a sus prácticas espirituales, Emanuel revela su inclinación por la meditación y el yoga, actividades que realiza junto a su madre, Antonia, quien lo introduce en el mundo espiritual. Comparte charlas enriquecedoras con ella sobre temas metafísicos, explorando juntos nuevas perspectivas de entendimiento.