La madre se quitó la vida y su papá lucha contra el cáncer. La sufrida vida poco conocida de Maratea
Poco dice el influencer sobre estos dos casos que siguen marcando su vida, seguramente no quiere "dar lástima". Aquí te contamos todo:
La trágica vida del papá de Santi Maratea: de luchar contra el cáncer a ver a su hijo "cambiar el mundo".
Aunque en los últimos años su nombre empezó a circular en los medios por ser "el papá de Santi Maratea", uno de los influencers argentinos más importantes de este tiempo, Rafa Maratea arrastra una historia personal que inspira a cualquiera. Y a eso se dedica: a motivar a otras personas.
Desde hace 25 años que tomó un camino que nunca abandonó. Luego de una vida marcada por la pérdida, perdió a sus padres por cáncer, a su hermana en un accidente de tránsito y a su esposa en manos del suicidio, decidió usar su relato para llegar a otros. Según él, todo empezó de manera fortuita.
Mientras trabajaba como vendedor, sus jefes se dieron cuenta de que los equipos en los que estaba siempre tenían las tasas de ventas más altas. Fue por eso que decidieron ir cambiándolo de grupos para que hiciera su magia. "Al tiempo me llamaron de una consultora inglesa y me ofrecieron trabajo como entrenador y capacitador", cuenta Rafa en diálogo con TN Show.
Sin embargo, el destino tenía otros planes para él. Cuando tenía 32 años le diagnosticaron un linfoma en los ganglios, un tipo de cáncer que comienza en las células llamadas linfocitos que forman parte del sistema inmunitario. "Fue muy difícil, porque no le encontraba la explicación a lo que estaba pasando. Era muy chico y tenía 4 hijos chiquitos", recuerda sobre una de las épocas más complicadas de su vida.
Fue tanto el sufrimiento, que en un momento quiso dejar de luchar: "Yo no quería seguir viviendo y le pedí a mi médico terminar la quimio, porque en 18 meses no había pasado nada. En un momento le dije ?quiero morir en paz, estoy endeudado, basta'". Sin embargo, Mariana, su esposa en ese momento, le dijo algo que lo cambió para siempre: "Vos te vas a morir, pero yo me voy a quedar sola con 4 chicos, así que dejate de joder y salí adelante".
Y así lo hizo. "Ahi caí en la cuenta de que no me podía morir, porque tenía hijos chicos. Tenés que estar preparado para escuchar lo que te llega, que no sabés de dónde va a llegar, pero que llega, llega seguro", asegura Rafa.
Aunque estuvo a punto de rendirse, Rafa asegura que luego de hablar con su compañera, y la madre de sus hijos, decidió modificar su manera de ver lo que le estaba pasando: "Entendí lo que significaba el sentido del propósito en la vida de una persona y me di cuenta de que no podía morirme. Algo mágico pasó, no sé qué, y a los 4 meses me curé".
Según él, ese pensamiento fue crucial para su recuperación porque encontró la razón de su vida, el motivo por la cual se levantaba todas las mañanas: "En mi caso era mi mujer, mis hijos, mi carrera. Yo no quería dejar de ver crecer a mis cuatro hijos. La base fue eso".
Durante ese tiempo, y a modo de terapia, Rafa escribió Lo imposible solo tarda un poco más. Aunque el libro surgió en 1996, fue publicado en febrero de 2022 por la Fundación Sales, en donde es embajador solidario.
Pero no era la única batalla que iba a tener que dar. En 2012, a los 50, volvieron a diagnosticarle cáncer, esta vez de tiroides. "El primer momento es exactamente igual, el primer pensamiento es que te vas a morir. Una vez superado eso, yo ya tenía en claro cómo seguir, así que fue un tramite, más fácil, más liviano, más rápido. Estaba enfocado en que tenía que lograr y en que no podía dejarme vencer", cuenta.
Al tiempo, Rafa volvió a recuperarse de esta enfermedad, pero recibió otro golpe del destino. En 2019 perdió a su esposa, Mariana, quien se quitó la vida luego de atravesar una depresión. Cuando le preguntamos cómo pudo superar tantas situaciones desgarradoras, él piensa un rato y responde: "No tengo la menor idea, es muy difícil de explicar. Siempre hay algo interno que te levanta, que te empuja, que te lleva. El gran problema es que nosotros no estamos preparados para bucear en lo interno de cada uno".
"Cuando atravesás situaciones dolorosas, el Universo te está diciendo algo, te está mostrando un camino. Si uno puede entenderlo y aprender de cada situación es mucho más llevadero. El gran problema es que la mayoría de nosotros no aprendemos de lo que nos pasa, estamos convencidos de que es una maldición", explica Rafa.
En ese sentido, señala que gracias al primer cáncer que le tocó atravesar llegó a ser la persona que es hoy y que, si no fuese por eso, no sabe en dónde estaría. "La clave es poder identificar el mensaje que te está pasando el Universo y clarificar el camino o el rumbo para que las cosas pasen. Es preguntarse ¿qué me esta queriendo decir esto?", agrega.
El suicidio de Mariana sin duda fue un golpe durísimo para la familia Maratea, un hecho que cambió para siempre su historia. Pero más allá de la tristeza, Rafa supo convertir el dolor en algo positivo.
"Cuando murió Mariana, a la semana, me llamó un conocido con el cual teníamos una relación comercial. Me invitó a tomar un café y me dijo ?estás llamado a hacer cosas grandes, estas acá para tocar el alma de los demás contando tu historia'", recuerda en la charla con TN Show. Fue en ese momento cuando se dio cuenta de que contando todo lo que le había pasado podía contagiar a otros para superar situaciones que estuvieran viviendo.
En una entrevista con PH (Telefe) Santi Maratea había hablado sobre el suicidio de su mamá. "Ella lo decidió, no lo entiendo y me dolió mucho, pero el gran desafío mío es respetarla a ella que fue muy juzgada toda la vida, por su forma de ser o su entorno que juzgaba tanto", había dicho el influencer durante el ciclo televisivo.
Sobre esta frase tan empática, su papá no dudó en comentar que las ideas del hogar fueron muy necesarias. "Santi tiene una cabeza privilegiada, va mas allá del bien y del mal. Y en casa los formamos para entender que cada uno es dueño de su vida y que nadie puede decidir por uno. El respeto hacia el otro es uno de los grandes símbolos del amor", explica.
El diálogo fue una de las claves para salir adelante tras la muerte de Mariana: "Les pedí que a partir de eso, que para nosotros fue un hito, en la familia no podía haber ni mentiras ni ocultamientos. Teníamos que hablar todo". Sobre la tristeza por el suicidio de un ser amado, dice: "Uno aprende a convivir con ese dolor, pero en ese dolor tenemos que entender que estamos solos en el mundo y que tenemos que apoyarnos unos a otros".
Comentarios